No ha sido por un abandono en el momento adecuado, ni por problemas mecánicos ajenos o cualquier otro tipo de infortunio de los rivales. Jari-Matti Latvala y Mikka Antila han dado una verdadera exhibición en Argentina, donde se han subido a lo más alto del podio sin que ni siquiera Sebastien Ogier pudiera hacer nada. Me quito el sombrero ante el rally de la pareja finesa. que bin puede calificarse de perfecto.
Pese al cambio de roles entre los dúos Latvala/Antila y Ogier/Ingrassia, la realidad que venimos viendo desde hace ya año y medio sigue más vigente que nunca: Volkswagen está no uno sino varios escalones por encima de Ford, Citroën y Hyundai. Especialmente llama la atención el tema de la fiabilidad, ahora que vemos lo mal que lo pasan en Hyundai para acabar un rally sin disgustos. Hacer un coche rápido debe de ser realmente complicado, pero imprimirle a la vez ese carácter fiable y robusto que tiene el Polo WRC está al alcance de muy pocos.
Alabanzas aparte, los cinco tramos que quedaban por disputarse no prometían mucha emoción y efectivamente así fue. Quedaba la duda de si Andreas Mikkelsen, con el tercer Volkswagen Polo, llegaría a disputarle el podio a Kris Meeke para firmar el que hubiera sido un brillante triplete. Finalmente no pudo ser y la distancia de un minuto largo se hizo insalvable. A algo más de veinte segundos se quedó el joven Mikkelsen, que con un par de tramos más probablemente hubiera adelantado al británico. Los bocados que le metía el noruego -medio minuto en cada una de las dos pasadas a Giulio Cessare-Mina Clavero, de 22 kilómetros- a buen seguro acabaron inquietando al piloto de Citroën.
Por detrás, la quinta posición de Neuville era segura al correr en tierra de nadie. Robert Kubica, finalmente ha sido sexto por delante de su compañero Elfyn Evans, en lo que era otra de los posibles luchas emocionantes, aunque finalmente el polaco se llevó el gato al agua con cierta comodidad. El objetivo de ambos era acabar el rally y así lo han hecho, aunque no tengo claro que sea un objetivo suficiente para el equipo a medio plazo. Martin Prokop culminó la prueba en octava posición, siendo Mikko Hirvonen noveno iniciar su remontada antes de ayer, cuando tras golpear el coche, se reengancho a la prueba.
No sé si hemos hablado alguna vez del "Rally 2", norma que permite reengancharse a los pilotos que abandonan y a la que se adhirieron por ejemplo el citado Hirvonen o Mikkelsen. A mí personalmente me provoca sentimientos encontrados: por un lado permite que los reenganchados sigan aportando emoción a las pruebas, y para las marcas sirve para sumar kilómetros o aprovechar para probar diferentes soluciones. En cambio permite a los que han abandonado llegar a codearse y superar a pilotos que no lo han hecho pero llevan una montura inferior o han tenido problema que han solventado sin tener que pasar por chapa y pintura, lo cual no parece justo. Abro aquí un debate y que cada uno opine.
Los puntos del power stage de El Cóndor se los repartieron Ogier, Hirvonen y Latvala, en ese orden. El campeonato de esta manera se aprieta un poco más entre el actual líder, Ogier y el segundo, el ganador de este Rally de Argentina Jari-Matti Latvala. Los 24 puntos de diferencia entre ambos dejan a Ogier a "tiro de abandono" de Latvala. Mikkelsen y Osberg empatan a puntos por el tercer puesto. El español Dani Sordo aún no ha sumado puntos, circunstacia que esperemos cambie pronto a medida que Hyundai vaya subsanando sus problemas de fiabilidad.
En la próxima cita el Mundial vuelve a Europa, a la fina tierra de Cerdeña. Nos vemos allí
Clasificación final Rally de Argentina (fuente. WRC.com)
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