Fuente: elblogsalmon |
Quería hacer un juego de palabras medio digno con el título
de la película de Steve McQueen, pero hoy no estoy fino. Aunque pensándolo
bien, quizá no haga falta tirar de imaginación, porque dada nuestra extrema
dependencia de la gasolina han sido básicamente eso: doce años de esclavitud.
Me estoy refiriendo a la sentencia del Tribunal de Justicia
de la UE, que ha declarado ilegal el famoso céntimo sanitario, ese cachondeo de
gravamen que aplicaron a los hidrocarburos
-nuestros gobiernos tienen mucho tino cuando se trata de aplicar tributos-
allá por 2002. Que de sanitario, por
cierto, no debe de tener gran cosa, si no que lo pregunten por la Comunidad de
Madrid a ver que piensan del tema.
Se sabía desde hacía tiempo que esta tasa tonteaba con la
ilegalidad, pero ni al gobierno de unos ni al de otros les pareció preocupar el
tema. Hasta el abogado general del TJUE puso en entredicho la licitud del
céntimo sanitario, pero en La Moncloa no son muy de escuchar voces autorizadas.
Ahora tenemos una sentencia firme y de carácter retroactivo. Son 13.000
millones de euros robados que el Estado debe devolver a los conductores porque,
pese a haber solicitado su exoneración, no se le concedió al no hallarse “la
buena fe de las autoridades”, condición indispensable para limitar los efectos
de la sentencia.
Fuente: elcorreo.com |
Ridículo a lo largo y ancho de Europa aparte, toca
preguntarse cómo nos van a devolver lo sisado. No falta quien piensa ir con la
factura del coche y el kilometraje del mismo para que le devuelvan euro por
euro lo que se le adeuda, aplicando el consumo homologado de su vehículo.
Otros, entre los que me encuentro, pensamos que con presentar los extractos
bancarios de todos nuestros repostajes
-afortunados los que siempre pagamos con tarjeta- debería valer como prueba para la reclamación
y por último está mi madre, que dice que nadie va a ver un duro. No es por ser
agorero, pero sabéis como yo que las madres siempre tienen razón.
Al parecer, no podrá reclamarse nada sin el correspondiente
ticket o factura -menudos desgraciados
que son- por lo que a priori los únicos
beneficiados de todo este asunto serán empresas, autónomos y todos esos
usuarios medio chalados cautos que guardan siempre la factura de todo.
Incluso estos últimos tendrán problemas dado que en la mayoría de las
gasolineras te dan un ticket de esos que usan tinta termonosequé que en un par de meses ya no se lee nada. En resumidas
cuentas: todo el empeño que pusieron en hurgarnos los bolsillos lo van a
emplear también en resistirse a la devolución.
Ya veremos cómo evoluciona el tema, pero desde luego no
tiene buena pinta para el usuario normal y corriente. Abro debate: ¿pensáis reclamar
el céntimo sanitario? ¿Creéis que veremos algún día el dinero de vuelta?
PD: El asunto este surgió cuando una empresa catalana, Transportes Jordi Besora, con dos narices, se plantó en el juzgado a reclamar unos 45.000€ en concepto del IVDMH, alias céntimo sanitario, que consideraba ilegal e injusto. Mi sincera enhorabuena para ellos.
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