¿QUÉ HACE UN ALFA 4C POR MADRID?

Imagínatelo: te levantas de la cama temprano listo para ir al trabajo como cada mañana. Al borde de caer en los brazos de Morfeo, te tomas el café de rigor y te enfrentas a la fría mañana con algo de música de tu reproductor. Cuando estas a punto de deshacerte de la modorra y asumir que te espera la misma rutina de siempre, algo sucede ante ti.

Un coche extraño se para a tu lado. Es blanco y tiene extrañas formas negras impresas  -tardas unos segundos en darte cuenta que es camuflaje típico de los coches en desarrollo-  y es extraordinariamente bello. Pero espera, que se está bajando la ventanilla: es Marc Gené y te está ofreciendo ir a dar una vuelta con él. Venga va, que suene ya el despertador que no cuela…

Pues esto es exactamente lo que le ha sucedido al protagonista de la última campaña de Alfa Romeo, que ha vivido probablemente una de las mejores experiencias de su vida. Sorprendentemente no fue el primero que respondió a la llamada de Gené. En el vídeo se ve como otro viandante rechaza la oferta por tener que ir a trabajar, aunque personalmente dudo que se haya inventado un trabajo lo suficientemente importante como para renunciar a subirse a un Alfa 4C, maravilla de cuya presentación en el Salón de Ginebra hablamos no hace mucho.

La sorpresa para el afortunado no termina ahí, pues Jordi le persuade para ir un poco más allá y presentarse en el Jarama a dar unas vueltas en al Alfa con el piloto de Ferrari como chofer particular. Cuando dan por terminada la sesión, protagonista al borde del pasmo incluido, se encuentra con otro 4C y una bellísima rubia que le mira con intenciones aviesas, ansiosa de que le enseñe todo su… buen hacer al volante. Fijaos en el minuto 1:44 como el chico se agarra al asidero de la puerta. Y es que, a veces, una chica guapa puede dar tanto miedo como un deportivo. O casi.