Como ya sabréis, Dani tendra en el próximo rally, el de Argentina, una oportunidad de verdad de demostrar su valía, que es mucha. Cuando era compañero de Loeb, se veía sometido al régimen de un piloto francés en un equipo francés cuya prioridad siempre sería el piloto de casa. Habrá quien discrepe conmigo y piense que tal vez Sordo nunca hubiera ganado a Loeb, pero lo cierto es que nunca lo sabremos por su clara condicion de "escudero".
Después vino BMW-Mini que, de la mano de Prodrive, presentó un proyecto serio que del que el español quiso ser partícipe. Sin nadie por encima de él, parecía el tren definitivo, hasta que BMW cambió de rumbo y a media temporada el equipo hizo aguas, escindiéndose en dos equipos, el "oficial", con Armindo Araujo como máximo exponente -extrañas aspiraciones, las de BMW- y un equipo satélite, Prodrive, con Sordo a la cabeza. Pocos recursos, coche sin evoluciones destacables, recortes en el programa de carreras y en definitiva, una manifiesta falta de apoyo.
Ha tenido que lesionarse -de la clavícula- Jari-Matti Latvala para poder tener la oportunidad de correr con un coche top en una prueba que se le da bien y sin presiones de ningún tipo, puesto que Malcolm Wilson, jefe de Ford, le escogio para sustituir al malogrado piloto finlandés.
Dani ya ha estado a los mandos del Ford WRC en Gran Bretaña con Carlos del Barrio, para tomar contacto con el coche de cara a la inminente prueba, y ya ha comentado que tiene un chasis mas nervioso que el del Mini, lo cual es bueno para zonas reviradas y perjudicial a altas velocidades, y que la diferencia de potencia a favor del Ford el palpable.
Esperemos que Sordo tenga mucha suerte la semana proxima en tierras gauchas, pues de poner el talento y la rapidez en los tramos se encargará él solo, seguro!
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